Recientemente designado presidente de la Fundación Bioquímica Argentina, el Dr. Eduardo Freggiaro es un profesional innovador con una valiosa experiencia en ámbitos académicos, profesionales y en instituciones nacionales e internacionales. Pionero en la aplicación de herramientas de internet a la capacitación de posgrado para bioquímicos, integra el equipo del Programa de Educación continua –PROECO– de FBA desde hace más de 20 años. Ahora, como titular de una de las instituciones bioquímicas más importantes del país, aspira a fortalecer las relaciones institucionales existentes y crear nuevos vínculos para seguir creciendo y mejorando en todas las actividades.
- ¿Qué significa para usted la designación de Presidente de la FBA?
Significa un enorme honor y espero estar a la altura de tan alta responsabilidad. La FBA es una de las instituciones bioquímicas más importantes del país y creo no equivocarme si digo que tal vez es de las más importantes de Latinoamérica. Basta observar los números de los resultados de sus programas de acción para darse cuenta del impacto real que la FBA tiene en el quehacer diario de los laboratorios y sus profesionales. Haber sido designado como presidente es para mí recibir un gran voto de confianza y voy a trabajar intensamente para retribuir ese apoyo. En mi vida profesional he tenido la suerte de hacer experiencias en distintos ámbitos laborales: el académico, el privado y el institucional. He sido docente universitario, soy director técnico de un laboratorio privado, secretario del Distrito V de la FABA, director del PROECO de FBA y miembro de la Federación Internacional de Química Clínica. Haber transitado esos caminos tan diversos me permitió conocer desde adentro esos lugares y me aportaron una valiosa experiencia que hoy puedo ponerla al servicio de la FBA. Sin dudas es una tarea que requiere mucho trabajo y compromiso, voy a brindar lo mejor de mí desde este nuevo lugar. De todos modos, liderar una organización como FBA es un trabajo en equipo y en ese aspecto estoy acompañado en el Consejo de Administración por excelentes profesionales con una amplia experiencia dentro de la Fundación. Creo que el recurso humano de FBA es su mayor capital y juntos podremos afrontar los desafíos que nos esperan en esta nueva etapa.
- ¿Desde qué año forma parte de la estructura de FBA desde su desempeño en el PROECO?
Mi trabajo en FBA se remonta a más de 20 años atrás cuando me sumé al equipo del PROECO. El programa de educación continua estaba por entonces dirigido por el querido Dr. Dante Valentini. En ese tiempo yo era docente en la FFyB de la UBA donde iniciamos experiencias en entornos educativos en línea. Así fue que me sumé al PROECO para comenzar a ofrecer cursos de posgrado en línea basados en el programa presencial que desarrollaban las Dras. Elena Camps y Cristina Cailliat. Hicimos un buen trabajo en equipo que dio sus frutos. En el año 2015, creamos el primer congreso virtual de bioquímica clínica VirtuaLAB, que este año tendrá su quinta edición. Hoy las actividades en línea son moneda corriente, pero fue realmente un desarrollo innovador para ese momento. También tuve una experiencia administrativa en FBA ya que durante un período de dos años formé parte del Consejo de administración durante la presidencia del Dr. Norberto Cabutti.
- ¿De qué modo ha participado en la organización y diseño de los congresos CALILAB y VirtuaLAB?
Siempre estuve muy involucrado en ambos congresos, pero puedo decir que VirtuaLAB es muy especial para mí porque fue al inicio una idea algo alocada que hoy está establecida con éxito. Luego de algunas idas y vueltas fue durante la presidencia del Dr. Roberto García cuando el proyecto se concretó. En CALILAB no tuve una participación formal, pero siempre colaboré fundamentalmente con la Dra. Nilda Fink en la obtención de financiamiento y en la invitación de los disertantes extranjeros del congreso. En la última edición fueron 14 disertantes extranjeros y muchos de ellos son personalidades de primer nivel mundial. El hecho de ser parte de la IFCC facilita la llegada a estos grandes nombres de la bioquímica. CALILAB mejora año a año y creo que en la última edición tuvimos un congreso de clase internacional, un evento que no tiene nada que envidiarles a los mejores congresos del mundo. Ahora el desafío está en seguir creciendo y mejorando en los dos eventos. Vamos a trabajar mucho para hacer esto posible y ofrecer a los colegas oportunidades únicas de capacitación y actualización.
- ¿Qué objetivos tiene en mente para este período (científicos y de política institucional)?
Las áreas en las que la FBA tiene participación son muy diversas y por medio de sus programas de acción llegamos a cada laboratorio y a cada bioquímico, sin importar en qué lugar del país ejerce su profesión. Por ese motivo, creo que la FBA tiene un rol principal en la diseminación de información. En este sentido, me gustaría que FBA inicie mediante grupos de trabajo específicos la confección de guías o recomendaciones para los laboratorios clínicos. Estos documentos son de gran utilidad en la práctica diaria de los colegas y son la mejor forma de estandarizar la práctica profesional. Esta es una tarea que puede realizarse en asociación con otras sociedades científicas, unidades académicas u organismos gubernamentales. Fortalecer esas relaciones institucionales y crear nuevos vínculos es una misión que quiero afrontar. Un ejemplo importante del fruto de estos vínculos es el convenio que tiene FBA con la provincia de Buenos Aires en el marco del Programa de Detección y Tratamiento de Enfermedades Congénitas (PRODYTEC) mediante el cual se realiza la pesquisa neonatal de errores congénitos en recién nacidos.
Los programas de FBA tienen un enorme prestigio y una producción realmente impresionante. Pero eso no significa que no pueden seguir creciendo. Creo que hay mucho camino por delante, FBA puede aportar mucha experiencia y know-how a otras organizaciones, no sólo del país sino también de otros países latinoamericanos que hoy están recorriendo el camino que nosotros ya hicimos. Con asociaciones solidarias con otras instituciones podemos ayudar a fortalecer la profesión en la Argentina y en la región. Dentro del país FBA está trabajando muy bien junto a la CUBRA para ofrecer respuestas a las amplias necesidades de los colegas en distintos lugares de la Argentina. Esta es una relación institucional fundamental que debe seguir creciendo.
En términos de colaboración institucional, hay dos instituciones fundamentales, vamos a trabajar de manera coordinada con FABA y EMSA en beneficio de los colegas. Por ejemplo, desde FBA podemos realizar una validación técnica independiente de los productos que comercializa EMSA y aportar así un valor agregado que brinde seguridad y confianza a los colegas. Las tres instituciones tenemos la misma visión sobre el desarrollo profesional y si bien realizamos distintas misiones tenemos un hilo conductor, siempre buscamos lo mejor para nuestros colegas. En un plano más personal, para mi gestión es muy importante haber sido elegido por los 10 Distritos y saber que cuento con el apoyo de los dirigentes de FABA. Esta confianza implica una gran responsabilidad para mí que espero retribuir con mi trabajo.
- ¿Qué potencialidades evalúa para la institución?
Desde su creación en 1992 la FBA ha ido acompañando el quehacer de la profesión. El modelo de programas de acción, en el que se basa el funcionamiento de la Fundación, ha mostrado ser muy productivo y adecuado. En cuanto a potencialidades, creo que la institución no tiene límites de crecimiento. La FBA siempre estuvo y está al servicio de las necesidades de los colegas, respondiendo con la máxima excelencia y profesionalismo. Nuestra profesión es muy dinámica y está siempre en continuo desarrollo. Es obligación de la FBA acompañar esos cambios con un sentido solidario, aumentar la calidad de la bioquímica implica mejorar todos los ámbitos y cada uno de los actores que la conformamos.
- ¿Cómo redundará en la FBA su participación activa en la IFCC?
Estoy formando parte de la Federación Internacional de Química Clínica desde el año 2012, representando al país gracias al apoyo de la CUBRA. Inicié mi tarea como miembro del comité de Internet e eLearning, para luego pasar a ser presidente de ese comité y miembro de la División de Comunicaciones y Publicaciones. Este año, la CUBRA me postuló como Representante Regional de la COLABIOCLI en el Comité Ejecutivo de IFCC. Tuve la suerte de ser elegido y por eso a partir de enero de 2024 comenzaré mis tareas en el comité ejecutivo representando a todos los países latinoamericanos que forman la COLABIOCLI. Todos estos años de trabajo en la IFCC me han permitido establecer vínculos profesionales con los más destacados científicos del mundo y con los directivos globales de muchas empresas del sector. En la organización de un congreso o de actividades de colaboración entre instituciones, estas relaciones personales ayudan mucho en la concreción de proyectos. Espero poner al servicio de FBA esa red de relaciones y al mismo tiempo llevar a la Fundación a lugares relevantes a nivel internacional. Muchos de los programas que tiene FBA son realmente casos de éxito a escala global y, aunque puede sonar inverosímil, desde nuestro país o región podemos aportar mucho a otros países, inclusive aquellos países desarrollados. Por ejemplo, hoy se está hablando de los laboratorios “verdes” en respuesta a la contaminación y al uso indiscriminado de recursos. En términos de reciclaje de materiales, ahorro de energía y optimización de recursos económicos nuestra región sabe cómo hacerlo desde siempre. Lo que hoy el mundo desarrollado está descubriendo como algo posible nosotros ya lo hemos optimizado hace tiempo.